Estamos viviendo los tiempos de la 4T, aunque hay quienes opinamos que es el 4T, un cuatro grandote. Nos lo pusieron y caímos. Bonitos y conciliadores discursos nos hicieron creer que si estaban dispuestos a realizar una gestión sin corrupción, sin abuso de poder. Pero recientemente somos testigos de un caso emblemático y que marca descaradamente la corrupción y la impunidad; es la historia de terror del uso y el abuso poder absoluto en el caso Gertz… ¿No lo conoces, ni te haz enterado? Aquí te comparto la historia. Alejandra Cuevas habla con periodistas de sus 528 días en prisión por un delito fabricado por el fiscal Gertz Manero.

¿Y la corrupción ya se acabó? No, y al parecer viene la peor parte de la gestión de la administración actual, ya que viene «el año de Carranza» en 2023.

«La solución somos todos» fue un eslogan de la campaña presidencial de JLP, pero en poco tiempo los ciudadanos la cambiaron por: «La corrupción somos todos».

En el lenguaje popular mexicano se han acuñado frases que reflejan la cultura del SOBORNO:

«Ayúdame a ayudarte» Frase para responder a la petición de cumplir algún trámite burocrático: si me ayudas (entregas dinero) te ayudo (resuelvo tu problema).

«No importa que roben, pero que salpiquen» Se utiliza para justificar que políticos y funcionarios se enriquezcan en el puesto, siempre y cuando compartan las ganancias.

«No quiero que me den, sino que me pongan donde hay» Una muy mexicana forma de interpretar la parábola de Confucio sobre el pez y el pescador.  Quien la utiliza no quiere recibir regalos (aunque no los rechazaría), pero que lo pongan en una posición privilegiada en el gobierno donde pueda enriquecerse. También se usa para describir el esfuerzo personal de progresar sin ayuda. Pero es cuestinable el «que lo pongan…»

«Un político pobre, es un pobre político», Acuñada la frase por Carlos Hank González, exgobernador del Estado de México y quien fue también «regente» de la capital del país. La frase enfatiza que para progresar en la política mexicana, es necesario tener mucho dinero. Lo curioso es que nunca es el dinero del político.

«El año de Carranza» (por Venustiano Carranza, otro héroe), «por si el Año de Hidalgo no alcanza».

Y aunque digan en propaganda que tenemos nuevos héroes en esta revolución de las conciencias.

SOBORNOS-AL REVES-SONROBOS